Un análisis del caso de violencia sexual que afecta al mundo político y deportivo, a la luz del canto “Un violador en tu camino”, Dra. Carolina Salinar Alarcón, Secretaria de Género UCN Sede Coquimbo.
A propósito de los casos de violencia sexual de público conocimiento que están en estos días en todos los medios de comunicación, hemos escuchado en reiterados paneles y espacios de discusión, muchas críticas a los movimientos feministas que, a juicio de algunos, han sido débiles a la hora de demandar por protección a las afectadas o denunciar y condenar los hechos.
En ese contexto, una de las preguntas que se escucha de forma repetitiva, es ¿dónde están LAS TESIS? aludiendo a la agrupación que hizo viral el canto “un violador en tu camino” y que recorrió el mundo entero, denunciando la vulnerabilidad de las denunciantes en una sociedad que no defendía ni protegía a las víctimas.
Por ello, la invitación es a realizar el análisis del texto del canto de Las Tesis, a la luz de los hechos mencionados:
El patriarcado es un juez, que nos juzga por nacer
Y nuestro castigo es la violencia que no ves
Las personas que tomaron conocimiento de la situación antes de la publicación en prensa, cuestionaron desde un principio los hechos. Incluso hubo un político que se refirió al tema diciendo que eran cahuines.
El patriarcado es un juez, que nos juzga por nacer
Y nuestro castigo, es la violencia que ya ves
Una vez que ya era evidente, se vierten diversas explicaciones contradictorias y nuevamente vemos como se relativiza la gravedad
Es femicidio, Impunidad para mi asesino
Es la desaparición, es la violación
En los casos mencionados no es femicidio, es abuso o violación. Respecto de la impunidad, se debe mencionar que, en el caso del Subsecretario, se le ofreció transporte para que fuera a avisar a su familia, renunció en cadena nacional frente a la moneda, y tuvo todas las pantallas para declararse inocente. En otros casos también de connotación pública, se ha relativizado el testimonio de las víctimas, indicando que las grabaciones de prueba habían sido realizadas sin consentimiento. Las víctimas fueron protegidas tardíamente. Antes de eso, hasta amenazas recibieron.
Y la culpa no era mía, ni dónde estaba ni cómo vestía
El violador eras tú, El violador eres tú
A estas frases agregaría: ni con quién trabajaba, ni donde cenaba, ni si le aceptaba una invitación a su jefe, ni si bebía 1 o 2 pisco sour, ni si era menor de edad y recibía manifestaciones de afecto de su abuelito, tío primo y un sin número de situaciones más.
Respecto del violador, es importante destacar que las responsabilidades penales son individuales y en los casos mencionados, el problema es una vez más la falta de comprensión de lo que implica el consentimiento.
Son los pacos, los jueces
El estado, el Presidente
El Estado opresor es un macho violador
En cada uno de los casos el sistema funcionó de acuerdo al mandato cultural: demorar decisiones, tapar los hechos, ocultar pruebas, justificar al denunciado, culpabilizar a las víctimas. El aparato estatal protegió al que tenía poder, al amigo, al que tenía un cargo importante.
Para finalizar: Antes de las Tesis, las víctimas terminaban además de violadas, humilladas, cuestionadas, nadie les creía, muchas veces sin trabajo porque las despedían, con depresión y con sus vidas deshechas.
El movimiento feminista relevó esta realidad e impulsó a la sociedad a generar un marco regulatorio más robusto, que ha permito que hoy, muchos como Macaya, Monsalve, Valdivia y tantos más esté en prisión preventiva o con arresto domiciliario. Lois movimientos sociales, ponen sobre la mesa los temas que nos afectan, y los políticos elegidos por la ciudadanía toman el guante para traducir esas demandas en leyes de la república.
Ahí están LAS TESIS.
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