La figura del Médico de los Pobres sigue concitando gran interés. En la actividad estuvo presente su sobrina nieta, Amy Ilijic.
Cierto día a fines de la década de los 80 el doctor Antonio Rendic acudió hasta la población Miramar de Antofagasta para atender a una mujer que se encontraba postrada. Una vez terminada la visita, bajó a pie hasta su vivienda en el centro, en calle Latorre.
Cuando cruzaba la franja ferroviaria en la parte alta de la ciudad fue abordado por dos malhechores que, bajo la excusa de “¿tiene un fosforito?”, pretendían asaltarle. El Doctor Rendic, adivinando sus intenciones, les espetó: “Sólo tengo este reloj y esta lapicera, tómenlos, pues nada más conseguirán de mí”. Al instante, uno de ellos le reconoció y dijo a su compañero con cierto pasmo ‘¡Es Don Antonio Rendic!’ y ambos malhechores, casi excusándose, le saludaron y escoltaron hasta su casa.
Querido por toda la sociedad que le rodeó en vida e incluso ya fallecido. Esta es una de las tantas anécdotas que gira alrededor de Antonio Rendic Ivanovic, el médico y poeta emigrado desde la Isla de Brac (Croacia) quien se destacó en la ciudad por atender a generaciones de antofagastinas y antofagastinos de forma desinteresada, incluso suministrándole los medicamentos.
CONFERENCIA
Es por esta entrega a la ciudad y su intachable trayectoria como médico y como poeta (escribía bajo el seudónimo de Ivo Serge) que la Universidad Católica del Norte (UCN) organizó una conferencia sobre su figura.
En la ocasión, el rector de la UCN, Dr. Rodrigo Alda Varas, manifestó que “para nosotros como Universidad es motivo de alegría conceder esta actividad, más aún en Semana Santa. La presencia del Doctor Rendic es transversal para los antofagastinos, pues muchos, incluso yo, fuimos atendidos cuando niños por él, y tuvimos la suerte de conocer a una persona con tanto cariño y dedicación a lo que hacía”.
Rendic recibió por más de 60 años a familias en su casa en calle Latorre a quienes atendía, omitiendo los cobros a los más necesitados. Fue galardonado como Hijo Ilustre de Antofagasta en 1953 y producto de esta entrega a los más necesitados, el Papa Pablo VI le confirió la Orden de San Silvestre en 1963. Falleció el 13 de febrero de 1993 a los 97 años.
La conferencia en la UCN estuvo a cargo de su biógrafo, José Miguel Armendáriz, académico de la Universidad de los Andes y quien fue el autor del libro Antonio Rendic Ivanovic, médico de los pobres, lanzado en su primera edición por la UCN en 1996.
EMOCIÓN
Entre los asistentes se encontraba la sobrina nieta de Antonio Rendic, Amy Ilijic quien, emocionada hasta las lágrimas, agradeció la instancia de conmemoración. “Me siento muy conmovida, muy agradecida por este reconocimiento que hacen de él. Y solo le pido a Dios que le permita que nos siga ayudando, sobre todo a esta Universidad a la que quiso tanto, y a esta ciudad a la que tanto amó. Para mí es emocionante esta conferencia, pues me trae muchos recuerdos, como por ejemplo que mantuvo su fe hasta el último día”.
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